Cisnes Salvajes, de Jung Chang

Por Leyre Latorre Gómez

 SOBRE LA AUTORA

Jung Chang nació el 25 de marzo de 1952 en Yibin, Sichuan. Su nombre de nacimiento es Er-hong. Proviene de una familia bien acomodada ya que tanto su padre como su madre eran miembros del Partido Comunista Chino. Su padre alcanzó un puesto alto de funcionario, por lo que contaba con privilegios como una vivienda para su familia, chófer y nodrizas.

Con 14 años se unió a los Guardias Rojos entusiasmada por participar en una de las transformaciones del país. Precisamente durante esta época se cambió el nombre debido a que Er-hong sonaba parecido a rojo tenue y no hacía honor al rojo fuerte que representaba a los comunistas. Por ello pasó a llamarse Jung, que hace alusión a asuntos militares. Pero cuando fue testigo de la violencia que implicaba el movimiento de la Revolución Cultural lo abandonó, más aún cuando sus padres, que habían realizado críticas al gobierno de Mao Zedong por el Gran Salto Adelante fueron castigados públicamente, arrestados y torturados. Estocausó graves daños en toda la familia ya que perdieron muchos privilegios y fueron obligados a abandonar su casa, aunque el más afectado fue su padre que  que desarrolló esquizofrenia causada por las torturas.

A lo largo de su vida Jung Chang ha tenido varias profesiones, fue campesina, doctora descalza y electricista hasta que las universidades reabrieron y en 1973 pudo ir a la Universidad de Sichuan a estudiar inglés. En 1978 fue a estudiar a Gran Bretaña, convirtiéndose en la primera persona de la China comunista en hacer un doctorado en una universidad británica, donde vive hasta hoy en día.

A partir de los años 90 se centró en la escritura logrando fama a nivel mundial y a pesar de estar censurada en China, sus libros han sido traducidos a más de 40 idiomas y, Cisnes salvajes ha vendido más de 15 millones de copias.

RESEÑA

Cisnes salvajes nos habla de la vida en China desde 1909 hasta 1978 centrándose especialmente en el papel de las mujeres. El libro trata temas como el vendaje de pies, el concubinato y el matrimonio de conveniencia, pero también nos enseña el cambio que hubo en la sociedad y, en concreto, en la vida de las mujeres con la llegada del comunismo al poder.

El libro empieza hablando sobre la infancia de Yu Fang, la abuela de la escritora, de la que nos cuenta el proceso del vendado de pies desde que tenía dos años con una tela y una piedra. A pesar de las quejas y gritos de la niña, siguieron adelante ya que se consideraba que resultaría más atractiva a los hombres. A lo largo del libro vemos las secuelas que esto tiene en su vida, ya que nunca puede caminar normalmente y sin dolor. También apreciamos cómo en el mismo libro se aprecian las transformaciones de esa época, pues nos dice que en 1917, al nacer su hermana, el vendaje de pies apenas se seguía haciendo, por lo que se libró de esta práctica.

Otro tema que trata el libro y que me ha parecido muy interesante es el concubinato. La autora nos cuentan cómo su abuela tuvo que ser concubina por decisión de su padre a pesar de que ella detestaba la idea. En la descripción de esta época vemos las limitaciones que debían aguantar las concubinas que,aunque no vivían en la residencia oficial, tenían que hablar y actuar con mucho cuidado al estar rodeadas de sirvientes que informaban al general de todo. Tenían miedo de que pudieraninventarse cualquier rumor y arruinarle la vida. También me ha parecido muy curioso lo difícil que fue para ella huir con su hija para que no se la llevaran con la familia del general.

A lo largo de todo el libro se puede ver muy bien el papel de las mujeres a lo largo de todos estos años, pero sobre todo podemos ver sus problemas y las cargas que se les atribuían.  En la época de juventud de la abuela se decían cosas como que las mujeres poseen cabello largo e inteligencia corta o que una mujer es gafe por el simple hecho de haber enviudado ya que se consideraba que era su culpa. Además, vemos los problemas que traía el haber sido concubina ya que la abuela de la autora fue molestada y amenazada por la familia del Dr. Xia, su segundo marido del que realmente estaba enamorada.

Con el paso de los años hubo mejoras en el papel de la mujer, pero no estuvieron exentas de seguir enfrentando grandes problemas. Aunque ya no había vendaje de pies pervivieron algunas prácticas estéticas dañinas hacia las niñas, como por ejemplo atar los hombros para que no fueran cuadrados. Con todo, podemos observar en el libro cómo con el paso del tiempo va desapareciendo la expresión de la feminidad al imponerse una manera de vestir y peinarse específica sin llamar la atención. Se comienza a extender con la ideología comunista el llevar el pelo corto y no maquillarse, además de vestirse con ropa que se asemeje a un uniforme dejando de usar vestidos o faldas.

Además, la autora destaca que durante la época de Mao las mujeres tenían el doble de trabajo que los hombres, ya que iban a la oficina, pero al volver tenían que encargarse de la familia, y se recaía sobre ellas la responsabilidad de que los hijos pudieran vivir bien y ser capaces de hacer las tareas domésticas. Esto se ve especialmente durante la época de hambruna en la que se decía “una mujer capaz puede hacer la comida, aunque no cuente con alimentos”.

Me ha parecido un libro muy interesante ya que ayuda a conocer muy bien el papel que ha sido adjudicado a las mujeres en la cultura china durante la historia reciente y los problemas que han ido arrastrando a lo largo de toda esta, pero no se limita a la mujer, sino que también nos explica de manera extensa y sencilla los hechos históricos que ocurrieron durante todos estos años y la manera en que afectaron a toda la sociedad. Sin embargo, no podemos perder de vista que, al ser una biografía de la familia de la autora, conocemos la historia desde el punto de vista de una mujer privilegiada, que vivía en la ciudad rodeada de muchas comodidades, por lo que no podemos saber muy bien cómo vivían las campesinas o las mujeres de familias más desfavorecidas.